Nuestro
almacén de las vivencias, que esté repleto de mermeladas; no les añadas
conservantes, colorantes ni aditivo alguno; mejor que sean mermelada simple y
natural, pura. pueden ser de cabello de ángel, de tomate de tamarindo, de moras
silvestres…,  sin embargo, cuando las adereces,  no confundas el azúcar con la sal.

Recuerda que con tan solo, una
mijita de una de ellas, basta para estropear el plato o postre  que
teníais en mente degustar. Aunque lo primordial es saber qué deseamos tomar.

 

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s